Llevo más de cinco años en el
equipo de música y he visto pasar sábado tras sábado y horas tras horas de
arduo trabajo musical junto a cada uno de los integrantes de este equipo y sin duda alguna cada semana tiene sus propios desafíos y sus propias luchas.
Sin embargo, el deseo de hacer música para quien se lo merece, es suficiente
para soportar más de dos horas de ensayo cada semana... aquí los detalles.
Hay de los que siempre tienen
una excusa para llegar tarde, de los que llegan tarde y no dan excusas, de los
que siempre llegan temprano sin importar ser por meses los únicos en sacar los instrumentos
sin ayuda, hasta que el cansancio es más fuerte y se pasan al grupo de los que
llegan tarde.
Hay de los que llegan, sacan
su instrumento y comienzan a calentar mientras el resto sigue acomodando todo
para empezar con el ensayo, hay de los que siempre están con "gripe",
hay de los que nunca escuchan las canciones de la semana pero se saben la
última del cantante de moda.
También están los que llegan,
se sientan y sin remordimiento alguno conversan hasta que todo esté listo, hay
de los que no hablan, de los que hablan mucho, de los que ríen por todo y de
los que siempre tienen un problema que contar.
Pero por encima de todo, hay
un grupo donde están los que te saludan, siempre, siempre, con un gran abrazo y
un gran beso, aquellos que te hacen sentir parte de un equipo, de los que
escuchan las canciones y te animan a hacerlo bien, de los que siempre tienen
algo lindo que contar.
Están aquellos que parecen
respirar música, de los que nunca se cansan, de los que solo te dan cinco segundos
para sacar un intro jajaja (sé que saben a lo que me refiero), aquellos que de
solo verlos inspiran, de los que quieren más (más ensayo, más canciones, más letras,
más instrumentos, más voces, más músicos).
Y son ellos, los que hacen
que las horas de ensayo queden cortas por todo el trabajo que hay que hacer. Y
es que no solo son dos horas de ensayo, son dos horas de vivencias, son dos
horas de diversión, dos horas de buena compañía. Porque sabemos que (en nuestro
caso) al día siguiente, esas dos horas se convertirán es seis de completa adoración
a quien se lo merece todo, a Dios.
A este segundo grupo de
personas las he visto, con alegría, crecer musical y personalmente, pero
también he visto, tristemente durante estos 5 años, a las personas del primer
grupo, quienes terminan alejándose del
equipo de una u otra manera. Así que saquen sus propias conclusiones…
Y tú, ¿En
qué grupo estás?
Se de quienes hablas y realmente inspiran :)
ResponderBorrarSii, siempre será inspirador...creo que vamos por buen camino
BorrarBuena descripción del equipo amiga, somos una cóctel de caracteres y motivaciones dentro del Ministerio, pero así crecimos y seguimos creciendo.
ResponderBorrarAsí es, y cuanto más cercanos estemos los unos a los otros, será muy fácil contagiarnos de la buena vibra... por cierto? Quién eres?
BorrarNo me digas que hay algo secreto que entender que no vi! jaj todo está clarísimo :)
ResponderBorrarno, no te preocupes no hay nada escondido, jajaja
BorrarParece que estoy en más de un grupo.
ResponderBorrar¿En cuál me pones? Jaja
jajaja parece que más de uno siente que está en varios grupos.
BorrarComo es eso de más de un grupo jajaja
BorrarTodos tenemos de lo bueno y lo malo que menciona Alle al inicio. Yo entiendo que la diferencia está en cuales son nuestras acciones en adelante.
Al fin es Dios quien da el talento a personas con pros y muchos contras como nosotros :p . Viene siendo responsabilidad nuestra si los usamos para dejarnos inspirar por otros y aprender a inspirar a los demás, o como menciona Alle al final, ser de los que en verdad no viven para usar su talento y se alejan.
Ahh que dramático jejeje